Ingredientes:
- 250 gramos de pasta (puedes usar macarrones, penne, o cualquier otra variedad que prefieras)
- 2 pechugas de pollo cocidas y desmenuzadas
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 cucharadas de harina
- 500 ml de leche
- 1 taza de queso rallado (puedes usar cheddar, mozzarella, o cualquier queso de tu elección)
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- Sal y pimienta al gusto
- Pan rallado (opcional, para gratinar)
Instrucciones:
- Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para horno con un poco de mantequilla o aceite en aerosol.
- Cocina la pasta de acuerdo con las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Escúrrela y reserva.
- En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la harina y mezcla bien para formar un roux.
- Vierte la leche gradualmente sobre el roux, batiendo constantemente para evitar grumos. Cocina la salsa bechamel a fuego medio-bajo hasta que espese y tenga una textura suave y cremosa.
- Añade el queso rallado a la salsa bechamel y mezcla hasta que se derrita por completo. Agrega la nuez moscada, la sal y la pimienta al gusto. Prueba y ajusta el condimento según tus preferencias.
- Incorpora el pollo desmenuzado a la salsa bechamel y mezcla bien.
- Agrega la pasta cocida a la mezcla de pollo y salsa bechamel, y revuelve para combinar todos los ingredientes de manera uniforme.
- Vierte la preparación en el molde para horno y espolvorea pan rallado por encima para gratinar.
- Hornea la pasta y pollo gratinados en el horno precalentado durante aproximadamente 20-25 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y burbujeante.
- Una vez que la pasta y pollo gratinados estén listos, retira el molde del horno y deja reposar durante unos minutos antes de servir.
Sirve la Pasta y Pollo Gratinados con Salsa Bechamel caliente y disfruta de este plato reconfortante y delicioso. La combinación de pasta, pollo y una rica salsa bechamel con el toque gratinado lo convierten en una opción irresistible para toda la familia. ¡Buen provecho!