¿Estás buscando una manera rápida y sostenible de cultivar tomates cherry en casa? Este proyecto único y divertido te permite hacer exactamente eso. En aproximadamente una hora, puedes transformar botellas de plástico usadas en atractivas macetas colgantes que balancearán suavemente tomates frescos durante todo el verano, justo en tu puerta trasera. ¿Listo para empezar? Vamos a sumergirnos en ello.
Por qué deberías probar esto:
Rápido y fácil: Este proyecto es sencillo y puede completarse en menos de una hora.
Amigable con el medio ambiente: Es una excelente manera de reciclar y reutilizar botellas de plástico usadas.
Atractivo estético: Una vez ensambladas, forman un arreglo visualmente atractivo de macetas colgantes, especialmente si utilizas botellas de plástico verde. Pero cualquier color o diseño es posible.
Materiales necesarios:
* Botellas de plástico usadas (2 a 4 litros)
* Plántulas de tomate cherry
* Cinta adhesiva
* Perforadora
* Cuchillo
* Hilo fuerte
* Tierra o compost
Instrucciones paso a paso:
1. Prepara la botella: Primero, asegúrate de que tus botellas de plástico estén limpias y libres de etiquetas. Corta cuidadosamente la parte inferior de la botella con un cuchillo.
2. Suaviza los bordes: El corte podría dejar bordes ásperos. Sella estos con cinta adhesiva. Luego, haz cuatro agujeros igualmente espaciados en la cinta (y a través de la botella), uno en cada lado.
3. Planta la plántula: Gira la botella boca abajo para que la abertura quede hacia abajo. Ahora, inserta suavemente tu plántula de tomate cherry en el cuello de la botella. Coloca la planta con cuidado y asegúrate de que el cepellón se expanda hacia el interior.
4. Agrega tierra: Llena la botella hasta tres cuartos con compost o tierra de calidad.
5. Asegura con hilo: Pasa tu hilo a través de los agujeros preperforados, asegurándote de que esté seguro y átalo firmemente.
6. Elige el lugar adecuado: Cuelga tu nueva maceta en un lugar soleado. Los tomates cherry prosperan con luz solar.
Recuerda: Tus tomates cherry colgantes necesitan riego regular. Revísalos con frecuencia y asegúrate de que la tierra esté húmeda pero no empapada. Este sencillo proyecto de bricolaje no solo garantiza que tengas tomates frescos al alcance durante todo el verano, sino que también es un testimonio del potencial de los proyectos reciclables. ¡Pruébalo y disfruta de productos frescos de tu maceta reciclada!
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