Algunos desechos de alimentos que generalmente descartamos son una fuente rica en potasio y calcio que se puede aprovechar para crear fertilizantes orgánicos para nuestras plantas.
Existen varias formas de preparar fertilizantes orgánicos para las plantas, y aunque es posible comprarlos ya listos, hacerlos en casa no solo ahorra dinero, sino que también beneficia al medio ambiente al reducir la producción de residuos.
Si deseas probar a preparar fertilizantes orgánicos para fomentar el crecimiento y estimular la floración de tus plantas, aquí te presentamos 5 métodos económicos y muy sencillos.
Fertilizante orgánico de cáscara de plátano:
La cáscara de plátano es rica en potasio, un mineral esencial para las plantas. Corta el plátano en trozos y cocínalos durante unos 15 minutos. Deja enfriar, filtra y vierte en una botella con difusor en spray. Rocía el fertilizante alrededor de la planta.
Fertilizante con vinagre de sidra de manzana:
El ácido acético en el vinagre de sidra de manzana ayuda a fertilizar plantas que necesitan un suelo ácido. Agrega una cucharada de vinagre al agua de riego. Repite al menos una vez al mes.
Fertilizante orgánico con cáscaras de huevo:
Las cáscaras de huevo son ricas en calcio y evitan la descomposición de las plantas. Tritura las cáscaras y colócalas directamente en la tierra o conviértelas en polvo.
Fertilizante orgánico con ceniza:
La ceniza es efectiva para favorecer la maduración de flores y frutos. Diluye la ceniza de madera en agua y vierte el líquido en la tierra o esparce la ceniza en el suelo a una distancia del tallo.
Abono natural con algas:
Las algas, frescas o secas, contienen oligoelementos que estimulan el crecimiento y la floración. Remoja algunas algas en agua durante 2-3 semanas y utiliza el líquido resultante para humedecer el suelo de las plantas.