Cultivar pimientos en botellas de plástico es fácil y no requiere riego – Método especial

¡Hola entusiastas de la jardinería!

¿No es reconfortante contemplar tus macetas de chile, nutriéndolas desde pequeñas semillas hasta vibrantes plantas? Hoy estoy encantada de compartir un método innovador que no sólo simplifica el proceso de cultivo del chile, sino que también reduce al mínimo las molestias del riego diario.

Inicios impulsados por plátanos:
Para dar el pistoletazo de salida a este viaje único, empezamos aprovechando el poder de los plátanos como estimulante del enraizamiento. El proceso consiste en cortar el chile maduro para extraer las semillas, que luego se colocan cuidadosamente en rodajas de plátano. Estas rodajas de plátano cargadas de semillas sirven de base para nuestra aventura de cultivo de chiles.

Botellas como recipientes:
Nuestro viaje da un giro fascinante con el uso de botellas de plástico de 5 litros, cortadas creativamente por la mitad. La parte superior, invertida y encajada en la inferior, crea un sistema de autorriego. Un tapón, perforado y adornado con un cordel de tela, facilita el trasvase de agua de la parte inferior a la superior, garantizando una humedad constante para nuestras plantas de chile.

La mezcla perfecta:
Hablemos ahora de la magia que contienen las botellas. La mezcla de tierra consiste en ceniza de cáscara de arroz y fibra de coco, que proporcionan un entorno ideal para que florezcan las plántulas. Siguiendo la ingeniosa técnica de la semilla sobre plátano cubierta de abono rico en nutrientes, se llenan las botellas y se plantan las plántulas.

Fertilización brillante:
A los cinco días del proceso de crecimiento, introducimos fertilizante de fosfato negro para dar a nuestras plantas de chile un impulso nutritivo. A continuación, regamos regularmente para mantener el ritmo de crecimiento. Las rodajas de plátano y la mezcla adicional se colocan encima, asegurando un suministro continuo de nutrientes esenciales.

Poder de la urea en la base:
En la parte inferior de cada botella, donde reside el agua, se añade fertilizante de urea para mejorar la nutrición general de la planta. Esta colocación estratégica asegura una liberación gradual de nutrientes, promoviendo un crecimiento constante.

Impulso del crecimiento en el día 20:
Después de 20 días, nuestras plantas de chile reciben otra ronda de atención. El fertilizante de fosfato y las cáscaras de huevo trituradas/en polvo se introducen en la mezcla, mejorando la fertilidad del suelo. Como siempre, el riego es un paso crucial después de cada adición para garantizar una absorción óptima.

Extravagancia de vitamina B y proteína de pescado:
En la marca de los 40 días, elevamos el bienestar de nuestras plantas de chile con una dosis de fertilizante de vitamina B y proteína de pescado. Este dúo dinámico fortalece las plantas, promoviendo un crecimiento robusto y una cosecha abundante.

Mantenimiento sostenible:
A lo largo de esta aventura de cultivo de chiles, es fundamental mantener los niveles de agua en la parte inferior de las botellas. La consistencia es el nombre del juego, asegurando que nuestras plantas reciban el cuidado que necesitan para un futuro floreciente.

En conclusión, este método innovador no sólo simplifica el proceso de cultivo del chile, sino que también muestra la belleza de la jardinería sostenible y eficiente. Desde los comienzos con plátanos hasta las capas ricas en nutrientes, nuestras plantas de chile prosperan en un ecosistema autosuficiente dentro de botellas de plástico. Prueba este método y disfruta de una abundante cosecha de chiles cultivados en casa. ¡Feliz jardinería!

Gracias por acompañarme en este viaje verde. ¡Feliz siembra!