Los lilos no solo son fragantes y coloridos, sino también fáciles de cultivar. Sin embargo, para asegurarse de que su lilo se mantenga saludable y florezca hermosamente, es esencial podarlo regularmente. En esta guía en 9 pasos, le mostraremos cómo podar correctamente su lilo.
1. Inicio de la poda en primavera: La primavera es el momento ideal para comenzar a podar su lilo. En este momento, debe cortar las flores frescas para ramos, recortar los tallos más largos y adelgazar los tallos débiles en la base. Evite podar en el final del verano o en otoño, ya que esto puede afectar el crecimiento futuro.
2. Despunte para una forma hermosa: Inspeccione su lilo en busca de tallos extra largos pero saludables y córtelos para mantener la forma. Utilice unas tijeras de jardinería y corte los tallos hasta el siguiente par de ramas laterales.
3. Desflorecimiento para un crecimiento saludable: Corte las flores marchitas para ayudar a la planta y permitirle invertir energía en nuevo crecimiento. Este proceso, conocido como desflorecimiento, contribuye a la salud de su lilo.
4. Aclareo para una mejor circulación del aire: Elimine los tallos muertos o enfermos cerca de la base para mejorar la circulación del aire y ayudar a la planta a utilizar su energía de manera más eficiente.
5. Poda anual en primavera: Realice la poda anual en primavera para fomentar el desarrollo de nuevos brotes. Esta poda debe hacerse en mayo o junio en el hemisferio norte y aproximadamente de septiembre a noviembre en el hemisferio sur.
6. Poda de rejuvenecimiento para plantas sobrecargadas: Si su lilo es viejo o está demasiado crecido, puede ser necesario un corte de rejuvenecimiento para volverlo saludable y atractivo. Realice este corte a principios de primavera y tenga en cuenta que podría sacrificar una temporada de floración para promover un crecimiento futuro.
7. Tenga cuidado con las plantas injertadas: Si su lilo está injertado, asegúrese de no cortar por debajo del punto de injerto para no alterar el crecimiento.
8. Eliminación de chupones: Retire los chupones para asegurarse de que la energía de la planta no se desperdicie. Un lilo saludable no debe tener más de 2 o 3 troncos grandes.
9. Fertilización después de la poda: Después de una poda intensa, es importante fertilizar la planta para restaurar el equilibrio de pH en el suelo y ayudar en su recuperación.
Siguiendo estos pasos, puede garantizar que su lilo se mantenga saludable y florezca magníficamente cada primavera.