Cómo Cultivar Forraje para Pollos y Conejos

Criar pequeños animales en tu finca puede ser una tarea exigente. No solo implica gastar dinero en alimentarlos, sino que también te preocupa su salud.

El forraje es económico y fácil de cultivar, ¡y crece súper rápido! ¡Puedes convertir granos en hierba frondosa en solo una semana!

¿Por qué deberías considerar cultivar forraje para tus pollos y conejos? Hay numerosos beneficios:

  1. Ahorra Dinero en la Alimentación de tus Animales:
    A todos les gusta ahorrar dinero. Aunque muchas personas se embarcan en la vida en el campo con la esperanza de gastar menos en la tienda de comestibles, la realidad es que cultivar y criar tu propia comida a veces puede ser costoso. Por lo tanto, es fundamental reducir costos siempre que sea posible. Cultivar forraje implica una pequeña inversión inicial, seguida de un mantenimiento económico. Si bien el forraje no reemplazará por completo la comida regular de tus animales, funciona como un excelente complemento que llena sus estómagos de manera asequible. ¡El forraje convierte una pequeña cantidad de grano en una cantidad significativa de alimento! Por ejemplo, una bolsa de 50 libras de grano puede producir más de 200 libras de forraje para tus animales, multiplicando por cuatro su alimentación con un esfuerzo mínimo.
  2. Alimento Verde Fresco Durante Todo el Año:
    El invierno puede ser duro para los animales. Pasan días en interiores, gastando energía para mantenerse calientes y comiendo los mismos pellets insípidos repetidamente. Sin embargo, puedes cambiar eso proporcionándoles forraje. El forraje está lleno de nutrientes y les encanta a tus animales. Es una maravillosa golosina, especialmente en los días fríos y helados.
  3. Alimento Rico en Nutrientes:
    Cultivar forraje no solo ahorra dinero, sino que también proporciona alimentos más nutritivos para tus animales. El forraje es rico en proteínas y contiene vitaminas y minerales esenciales que contribuyen a la salud general de tus animales.
  4. Prevención del Aburrimiento:
    El aburrimiento puede ser un problema importante para los animales, especialmente las aves de corral. Cuando se aburren, pueden volverse agresivos y pelear entre ellos, un problema que se intensifica en invierno cuando están confinados en interiores. Alimentar forraje una o dos veces al día mantiene a tus animales ocupados, evitando que se enfrenten entre sí.

Aquí tienes algunas cosas importantes que debes saber sobre el cultivo de forraje:

  • Temperatura: El forraje crece mejor a temperaturas más frescas, alrededor de 65 grados Fahrenheit. Cultivarlo en temperaturas más cálidas puede provocar el crecimiento de moho, mientras que temperaturas más frías pueden resultar en que los granos no germinen correctamente.
  • Ventilación y Circulación de Aire: La circulación de aire adecuada es crucial para el éxito del cultivo de forraje. Cultivarlo al aire libre es la solución ideal, ya que garantiza un flujo constante de aire fresco. Si debes cultivarlo en interiores, asegúrate de tener una buena ventilación, como una ventana abierta o un ventilador.
  • Complemento, no Alimentación Completa: El forraje no puede reemplazar por completo la comida regular de tus animales, ya que carece de ciertos nutrientes y fibras necesarias para su bienestar. Sin embargo, funciona como un excelente complemento, especialmente durante el invierno cuando escasean los alimentos verdes frescos.

Dónde comprar granos:

Existen varias opciones para comprar granos, pero es fundamental asegurarse de que no hayan sido tratados químicamente y sean seguros para el consumo animal. La frescura también es importante para evitar el crecimiento de moho.

  1. Tiendas de Agricultura: Las tiendas de agricultura son los mejores lugares para comprar granos para el forraje. Ofrecen bolsas grandes de 50 libras de granos de alta calidad diseñados para la alimentación animal a precios asequibles.
  2. En Línea: Si no tienes una tienda de agricultura cercana, también puedes pedir granos en línea. Sin embargo, ten precaución con el embalaje, ya que los granos pueden no estar bien protegidos y podrían derramarse durante el envío.

Suministros necesarios para cultivar forraje:

Existen numerosas formas de cultivar forraje para tus animales, por lo que puede requerir algo de experimentación para encontrar el sistema exacto que funcione mejor para ti. Te sugiero comenzar de manera pequeña y expandirte a medida que te familiarices con el proceso. Siempre puedes comprar suministros mejores y más grandes en el futuro, pero es importante asegurarte de que esta sea una solución que funcione para ti y tus animales antes de comprometerte a gran escala.

Esto es lo que necesitas para empezar:

  1. Una bolsa de grano (la cebada o el trigo funcionan mejor, pero puedes experimentar con otros tipos de granos).
  2. Agua (el agua del grifo funciona perfectamente).
  3. Contenedores poco profundos con agujeros de drenaje para el cultivo del forraje. Considera el uso de contenedores reutilizables para almacenar alimentos o bandejas para la siembra de semillas con agujeros de drenaje.
  4. Luz brillante o luces de cultivo para que el forraje prospere.

Cómo cultivar forraje, paso a paso:

Paso 1: Lavar los granos:
Es importante que los granos estén muy limpios desde el principio. Lavarlos eliminará cualquier espora de moho, hongo o huevos de insectos que puedan convertirse en un problema más adelante. Simplemente coloca los granos en un colador y enjuágalos bajo agua corriente durante unos minutos.

Paso 2: Remojar los granos:
Coloca los granos en un recipiente grande y limpio, cubriéndolos con unos pocos centímetros de agua limpia y fresca

. Puedes usar agua del grifo normal, no es necesario complicarse con este paso. Puedes cubrir el recipiente con una toalla o film transparente para evitar que los gatos o insectos curiosos accedan.

Deja los granos en remojo durante toda la noche.

Paso 3: Preparar los contenedores:
Lava bien los contenedores que vayas a utilizar con agua caliente y jabón antes de usarlos para el cultivo del forraje. Una vez limpios y listos, puedes llenarlos con los granos remojados.

Paso 4: Agregar los granos:
Distribuye los granos de manera uniforme en los contenedores, creando una capa de aproximadamente medio centímetro de profundidad.

Paso 5: Agregar agua limpia y fresca a los granos todas las mañanas y tardes:
Si tu grifo tiene una función de rociado, es la forma ideal de regar el forraje. Simplemente rocía uniformemente todos los granos y permite que el exceso de agua drene a través de los agujeros de drenaje. Lo mejor es regar el forraje dos veces al día, por la mañana y por la tarde, pero si tu horario no lo permite, también puedes hacerlo una vez al día.

Nota: Nunca vuelvas a usar el agua que drenó del contenedor, ya que podría provocar el crecimiento de moho.

Paso 6: Coloca los contenedores en un lugar con luz brillante:
Puedes colocar los contenedores cerca de una ventana brillante o llevarlos afuera donde reciban buena luz. Si no tienes ventanas adecuadas en interiores, también puedes usar luces de cultivo para cultivar el forraje. Si decides colocarlos al aire libre, procura ubicarlos en un área protegida, ya que los animales salvajes estarán muy interesados en tu pequeña operación de forraje, especialmente si estás cultivando en primavera o invierno, cuando es difícil encontrar alimentos verdes frescos.

Observa el progreso de tus granos día a día: primero verás cómo se forman las raíces y luego las hojas, que crecerán cada vez más a medida que avance la semana.

Paso 7: Alimenta a tus animales:
Luego de aproximadamente siete días, tu forraje estará completamente crecido y listo para alimentar a tus animales. Retira toda la alfombra de forraje de los contenedores y córtala en pedazos para alimentar a tus animales. Es mejor alimentar a las gallinas con pequeñas cantidades de forraje varias veces al día para evitar que coman en exceso. A los conejos les encanta comer las hojas, mientras que las gallinas consumirán todo, ¡granos y raíces incluidos!

Nota: Puedes sentirte tentado a arrojar el contenedor lleno de forraje junto a tus animales, ¡pero no lo hagas! En las instalaciones y jaulas hay muchas bacterias, esporas e insectos, y no quieres contaminar tus contenedores con nada; siempre retira el forraje del contenedor antes de alimentar.

Desarrollar un sistema rotativo:

Puedes desarrollar fácilmente un sistema rotativo para cultivar forraje y asegurarte de tener siempre forraje fresco disponible para tus animales. Para hacerlo, después de alimentar a tus animales con el contenido de un contenedor, límpialo y desinféctalo, luego sigue el proceso de cultivo nuevamente para producir más forraje.

Consejos adicionales:

  • Asegúrate de almacenar tus granos en un lugar seguro y seco para evitar el crecimiento de moho y protegerlos de plagas como ratones, ratas y aves salvajes.
  • Si notas que el forraje presenta moho o hongos, deséchalo y comienza de nuevo. Asegúrate de que los contenedores estén limpios y de que el forraje drene adecuadamente después de cada riego para evitar que vuelva a ocurrir.