Cómo crear en casa brotes gordos de judías blancas utilizando botellas de plástico: Una guía sencilla

Materiales que necesitarás:

Judías verdes (las judías mungo son ideales para germinar).
Agua tibia.
Tres botellas grandes de plástico (de al menos 5 litros cada una).
Una botella más pequeña para ayudar a distribuir las semillas.
Un taladro o un objeto afilado para hacer agujeros en las tapas de las botellas.
Toallas
Un cuchillo o tijeras para cortar las botellas.

La guía paso a paso:

1. Prepara las judías:

Comience por coger un bol y colocar en él sus judías verdes. Asegúrese de haberlas limpiado y enjuagado bien. A continuación, añada agua templada al bol, cubriendo las judías por completo. Mézclelas suavemente para que se humedezcan bien. Déjelas en remojo durante unas cuatro horas. Este periodo de remojo ayuda a iniciar el proceso de germinación al hidratar las judías.

2. Preparación del biberón:

Mientras las judías están en remojo, puedes preparar las botellas grandes de plástico. Tendrás que hacer agujeros en las tapas de las botellas para facilitar una aireación adecuada. Utiliza un taladro o un objeto afilado para hacer pequeños agujeros en las tapas. Estos agujeros permitirán la circulación del aire, esencial para el crecimiento de los brotes.

3. Distribuya las judías:

Una vez que las judías hayan estado en remojo el tiempo necesario, coja un frasco más pequeño y corte la parte superior para crear un embudo. Este embudo facilitará el trasvase de las judías a los frascos grandes. Vierte suavemente las alubias remojadas en los frascos grandes, distribuyéndolas uniformemente en los tres recipientes.

4. Cubrir con tapones y toallas:

Después de distribuir uniformemente los granos, coloque los tapones en los frascos grandes. Para garantizar que los brotes permanezcan en un entorno oscuro y húmedo, cubra los frascos con toallas. Lo ideal es que estas toallas se mantengan ligeramente húmedas. Puedes conseguirlo rociándolas ligeramente con agua.

5. Regar y escurrir:

Durante los cuatro días siguientes, tendrás que cuidar de tus brotes. Riega las judías tres veces al día, asegurándote de que reciben suficiente humedad para crecer sanas. Riega cada sesión durante unos cinco minutos. Después de cada riego, vuelve a tapar los frascos y colócalos boca abajo. De este modo, el exceso de agua se escurre y los brotes no se encharcan. Recuerda volver a tapar las botellas con toallas después de cada sesión para mantener la oscuridad deseada.

6. Cosecha los brotes:

Tras cuatro días de cuidado, los frascos de plástico estarán llenos de brotes de judías blancas. Para cosecharlos, tendrás que abrir las botellas. Ten cuidado en este paso para no dañar los delicados brotes. Una vez que hayas sacado los brotes de los frascos, enjuágalos bien antes de añadirlos a tus platos favoritos.