Cómo aplicar la vitamina C en el rostro para obtener un efecto «botox»

 

A nadie le gusta empezar a notar las primeras arrugas en el rostro, aunque formen parte del proceso normal de envejecimiento de la piel. Las arrugas son inevitables, pero es posible retrasar su aparición utilizando cremas protectoras y adoptando una rutina de belleza.

La vitamina C es un potente antioxidante que protege las células de los efectos de los radicales libres, moléculas generadas cuando el cuerpo procesa alimentos o se expone a factores externos como el humo del cigarrillo o la contaminación.

Esta vitamina, que el cuerpo no produce, proporciona luminosidad a la piel, actúa como despigmentante y es un cofactor para la síntesis de colágeno. A continuación, te explicamos cómo agregar la vitamina C a tu rutina de belleza.

Ingredientes:

  • 1 cucharada de polvo de vitamina C (disponible en herboristerías)
  • 1 cucharadita de agua
  • 1 cucharada de gel de aloe vera
  • 1/8 de cucharadita de vitamina E
  • 5 gotas de aceite esencial de incienso

Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea. Vierte la mezcla en una botella de vidrio oscuro para evitar que la luz solar la degrade.

Antes de usarla, lava bien tu rostro con agua y jabón. Agita bien la botella y aplica la mascarilla con los dedos, realizando pequeños masajes. Deja actuar durante toda la noche y enjuaga por la mañana.

Aplica la solución de vitamina C cada tres días para disfrutar de sus efectos rejuvenecedores, antiedad y contra las arrugas.