En nuestros hogares encontramos a menudo invitados no deseados que suelen perturbar la armonía de nuestro bienestar y limpieza, ya que se cuelan en los lugares más inconcebibles.
Hablamos de los insectos, que aparecen en los rincones más insidiosos y suelen visitarnos porque rebuscan las migas de comida, por lo que es importante que todo esté limpio.
HORMIGAS: CÓMO MANTENERLAS ALEJADAS DE NUESTRAS CASAS Y JARDINES
Pero a menudo, esto no tiene nada que ver con la higiene en nuestros hogares, ya que algunos insectos son capaces de atravesar grietas en la pared y entrar en nuestras casas sin que nos demos cuenta.
Entre los insectos más comunes están las langostas, que consiguen entrar en nuestra casa por diminutas entradas o incluso por la tierra de nuestras plantas, y podemos encontrarnos una auténtica colonia.
Los hormigueros no hacen más que recoger restos de comida y llevarlos a la casa ancla o a su nido para asegurarse de que tienen el suministro adecuado para la temporada de invierno y así poder vivir durante mucho tiempo.
Aunque su presencia es inofensiva en comparación con otros insectos, es sinónimo de falta de higiene y por ello hacemos todo lo posible para evitar que se cree una colonia de hormigas en nuestros hogares y podemos mantenerlas alejadas con un método eficaz.
Hay muchos productos en el mercado que actúan como repelentes, pero también pueden causar alergias y problemas a los humanos. Pero no todo el mundo sabe que combinando dos ingredientes, las hormigas pueden salir de nuestras casas.
Y es que, atraídos por un alimento muy goloso, se encontrarán cambiándolo por otro que vamos a añadir que no les gusta nada y se lo pensarán dos veces antes de volver a acercarse.
El repelente natural
Hablamos del bicarbonato sódico, muy útil para muchos menesteres domésticos pero poco apreciado por los insectos, ya que puede causarles problemas por su olor y sabor.
Para conseguir que las hormigas formes abandonen nuestras casas y nuestros jardines jardines basta con colocar una cucharada de bicarbonato de sodio y una cucharada de azúcar dentro de un vaso y remover hasta que los dos ingredientes se mezclen.
Después, lo único que tenemos que hacer es aplicar el polvo obtenido en el suelo o en los rincones de nuestras casas y veremos como las hormigas habrán desaparecido de nuestros hogares después de haber sido engañadas.
De hecho, el queso, azúcar se sentirá atraído por este polvo pero luego se encontrará frente al bicarbonato e inmediatamente se apartará para evitar este ingrediente que tanto le desagrada.
Con muy poco dinero, habremos creado un repelente natural y todos podremos vivir en armonía en nuestras casas sin miedo a que una colonia de hormigas nos visite en busca de comida.
Las hormigas, a su manera, pueden ser insectos agradables y trabajadores, pero ciertamente no son agradables para tener como mascotas.