El romero, una planta aromática muy versátil en la cocina, también tiene muchos beneficios para la salud y la belleza. Su propagación, lejos de ser sólo un apasionante proyecto de jardinería, ofrece la oportunidad de aprovechar al máximo las asombrosas propiedades de esta planta en su propio jardín.
El método más eficaz para propagar el romero es el de los esquejes, muy recomendado por los expertos. Un jardinero experimentado puede proporcionarle valiosos consejos sobre cómo fomentar un crecimiento robusto y exuberante. Intercambiar conocimientos con profesionales locales puede ayudarle a conseguir los mejores resultados.
Es una buena idea prestar atención a los consejos de los expertos y seguir cuidadosamente las instrucciones, en lugar de ir por libre. Comprender el material lleva tiempo, y es perfectamente aceptable escuchar a alguien especializado y aprovechar sus consejos.
El método que presentamos aquí es el de los esquejes para propagar el romero, una técnica que ya ha dado buenos resultados con muchas otras plantas. Para empezar, corte una ramita de romero en ángulo y quítele las hojas. Coloque la ramita en un vaso o una botella llena de agua y sitúela en un lugar bien iluminado. Añada agua según sea necesario para mantener la rama suficientemente sumergida en todo momento.
Al cabo de una semana, aparecerán los primeros brotes y, al cabo de unos veinte días, se formarán las primeras raíces. Utilice una maceta de al menos 15 cm de profundidad, llénela de compost y plante la rama. Asegúrate de que la tierra de la maceta permanezca suficientemente húmeda en todo momento.
Este sencillo método le permite cultivar una planta sana a partir de una ramita de romero, con lo que no sólo embellecerá su jardín, sino que también satisfará sus necesidades culinarias, cosméticas y médicas.