Los narcisos son las flores de primavera que deleitan nuestros ojos con su belleza y delicadeza. Se encuentran prácticamente en todos los jardines.
Los narcisos permanecen verdes mucho tiempo después de la floración. ¿Y qué podemos hacer con sus hojas, que crecen y confunden a las plantas, lo que crece a su lado? Hoy queremos mostrarte una solución a este problema.
Si cultiva narcisos en su jardín, probablemente sepa que, tras la floración, sus hojas siguen creciendo y luego caen al suelo, pudiendo cubrir las plantas que crecen a su alrededor.
Los tallos de las flores deben cortarse por la mitad. Las hojas de narciso también pueden cortarse por la mitad o, como recomiendan algunos floristas, trenzarse en cestas. Habiendo probado el segundo método, podemos decirle que las hojas de narciso no sufren después del trenzado: permanecen verdes, jugosas e incluso decoran el jardín con su interesante aspecto. Los capullos no se aflojan.
Así pues, coge las hojas de una planta (no las trences todas a la vez), divídelas en 3 partes más o menos iguales y trénzalas en una cesta ancha, dejando libre la parte superior (unos 10 cm). No presione ni apriete las hojas de narciso durante este proceso. Al final, sujete la pinza con el extremo de la hoja más larga, enrollándola alrededor de la pinza.
Puedes dejar las cestas tal cual, o juntarlas y unir sus puntas con hilo grueso.
Un mes después de la floración, las hojas del narciso se secan y pueden retirarse.
Tras la floración, los narcisos siguen necesitando cuidados: es necesario regarlos, pero no con tanta frecuencia. Puedes abonarlos con abono fosforado para estimular el desarrollo de los bulbos.
¡Feliz jardinería!