LA REGLA DE LOS 10 SEGUNDOS PARA AHORRAR GASOLINA: SIN EMBARGO, CASI NADIE LA APLICA

AHORRAR GASOLINA: UNA NECESIDAD

Desde finales de 2022, tras el conflicto en Ucrania, el coste de la gasolina se ha disparado. Por eso, ahorrar gasolina se ha convertido en una verdadera necesidad para muchas familias.

Por mucho que uno quiera utilizar el transporte público o caminar, hay casos en los que no se puede prescindir del coche. Por eso, todos los trucos que ahorren gasolina y algo de dinero en la cartera son bienvenidos.

¿Por qué ha subido tanto la gasolina? Hay muchas razones por las que sube el precio de la gasolina y la mayoría de ellas se derivan de una combinación de factores económicos, medioambientales y geopolíticos. En primer lugar, si la demanda de gasolina supera la oferta disponible, los precios pueden subir.

En segundo lugar, la gasolina se produce a partir del petróleo crudo. Por lo tanto, los precios del petróleo influyen en el coste de la gasolina. Si los precios internacionales del petróleo fluctúan, automáticamente, los precios de la gasolina pueden subir.

La inestabilidad política y/o los conflictos en las zonas productoras de petróleo pueden afectar a la producción y el transporte del crudo. Así, un mercado incierto puede provocar subidas de precios. A esto hay que añadir los impuestos y tasas gubernamentales, que, al aumentar, pueden provocar un incremento del precio final de la gasolina.

A esto se añaden las condiciones meteorológicas, los cambios en las políticas energéticas medioambientales y la fluctuación de los costes de refinado y producción, que pueden ser decisivos para un aumento del precio final.

En este escenario, se comprende lo crucial que es ahorrar gasolina. Llegamos, pues, al punto en el que explicaremos la regla de los 10 segundos.

La regla de los 10 segundos

La Hinkle Charitable Foundation, una fundación estadounidense, ha desarrollado una estrategia que los ciudadanos de a pie pueden adoptar fácilmente para ahorrar gasolina.

Los estudiosos han señalado que nunca se debe apagar el coche si se está en un atasco, esperando en un semáforo o cuando se para en un área de descanso de la autopista. De hecho, el motor del coche debe dejarse en marcha más de diez segundos.

Sin duda, este consejo no será bien recibido por algunos ciudadanos, acostumbrados a saber que cuanto más tiempo funciona el coche, más consume.

En realidad, no es así. De hecho, cuando el coche sufre una parada y luego otro arranque, puede consumir mucha más gasolina. Por eso hay que dejar el coche al ralentí, sin apagarlo.

Los investigadores han descubierto que los ciudadanos estadounidenses, de media, pasan 16 minutos al día conduciendo sus coches al ralentí.